“El tema del
día
¿Excursión turística o viaje de reconocimiento de
los OVNIS?
Desde hace
aproximadamente una década –época en que la oficina de turismo gubernamental
logró determinada autarquía, ya que antes formaba parte de la dirección de
prensa y afines de la gobernación-, Corrientes se viene transformando
gradualmente en un pequeño centro turístico, que anualmente, atrae –particularmente
en las temporadas de Carnaval–, grandes
cantidades de viajeros del resto de la región Nordeste (Chaco, Formosa,
Misiones) y del país, en especial de las provincias de Santa Fe, Entre Ríos,
Córdoba y Buenos Aires. La madrugada del jueves último, y esto lo testimonia,
entre otros correntinos, un ex-funcionario de la Subdirección de Turismo de la
provincia de Corrientes, Eduardo Sánchez Aguilar, nuestra ciudad fue centro de
un “contingente turístico” de extraterrestres que viajaban (¡felices de ellos!)
en objetivos voladores no identificados, o para decirlo más brevemente en
coloridos y resplandecientes OVNIS.
Eduardo Sánchez Aguilar –que ya tiene cierta experiencia en estos contactos del primer
tipo, como diría Fabio Zerpa, ya
que, como informáramos en estas mismas páginas hace poco más de de una década,
él, junto a Pastor Vega y Damián Vega,
en momentos en que volvían de Palmar
Grande en una camioneta fueron sorprendidos por una flotilla similar de platillos
voladores–, nos describió la forma en que volvió a ser testigo, la madrugada
del jueves último de esta nueva excursión de OVNIS.
El ex-subdirector de Turismo, nos informó que él, juntamente con
el periodista Renán Ruiz, la
cantautora Teresa Parodi, el
dibujante Juan Carlos Soto, los
poetas Oscar Portela, José Gabriel
Ceballos y Alejandro Mauriño –en momentos que estaban concluyendo el sarao
que acompañó a la presentación oficial del libro “Contra Viento” de este último, en el “Catamarán II” –, de pronto fueron sorprendidos por la
extraordinaria y luminosa visión que prácticamente relegó al más profundo y
oscuro olvido el motivo que los había reunido en ese pintoresco lugar.
De esta forma, la cubierta de esa embarcación amarrada al otrora
muelle de la balsa que unía Corrientes con Resistencia, fue el mejor
observatorio de esa flotilla de una docena de platos voladores que sobrevolaban
la antigua ciudad de San Juan de Vera de las Siete Corrientes, la madrugada del
jueves último, desde las 2,50 a las 2, 57.
Esa maravillosa visión de una nave madre más grande que su escolta
y que sobrevolaba la ciudad a menor altura que las otras, como jugando o
compitiendo con la iluminación terrestre del puente “General Belgrano” al pasar
paralelamente al mismo, despertó la
inspiración de los poetas, músicos y pintores presentes, comentó Sánchez
Aguilar ante EL LITORAL.
(Juan Carlos Soto ya se ha puesto en la tarea de registrar, con su
magistral pincel, el paso sobre el puente y el resto del río Paraná y la costa
correntina, de esa escuadrilla de objetos voladores no identificados. Oscar
Portela, a su vez, al igual que el autor de “Contra Viento”, Alejandro Mauriño,
están empeñados en escribir unos sonetos sobre el tema. Teresa Parodi –dicen–,
le cantará una balada).
Más allá del humor que identifica a Sánchez Aguilar y a sus
expresiones, lo cierto es que el paso de esta pequeña flota (¿en viaje de
reconocimiento por la cuestión del diferendo limítrofe austral?), ha despertado
miles de conjeturas en la mayoría de los ciudadanos, de Corrientes,
particularmente en aquellos –un tanto
trasnochados–, que la vieron para a las 3 de la madrugada.
El realismo de este pasaje, resulta incuestionable. Una prueba al
canto: una maestra noctambula, llamó, un tanto acalorada, a esta redacción,
para indicar que no era cierto lo que dijo uno de nuestros entrevistados, eso
de que la nave madre viajaba junto con las más pequeñas. “No, de ninguna manera: la nave madre viajaba más bajo que las otras,
más cerca de la tierra. Se lo aseguro”, indicó, al mismo tiempo que
formulaba otras aclaraciones sobre la presunta independencia de ese vehículo no
identificado de categoría mayor (clase “A”).
Esta imprevista visita
de esos turistas extraterrestres (aún no hemos comprobado si aterrizaron en algún
punto de nuestra provincia), motivó, en la jornada de ayer, en las oficinas,
calles y negocios donde recalaban los correntinos para sus compras navideñas,
los más diversos comentarios.
En un chequeos
realizados por EL LITORAL, aparecieron incluso quienes indicaron a la flotilla
de platillos voladores, como espías de una potencia extranjera.
Otros –incrédulos– reflexionaron que todo ello era efecto de una
especie de psicosis colectiva provocada por el anuncio del estreno del
audiovisual documental de Fabio Zerpa
en el cine “Rex” titulado “Contactos del
Tercer Tipo”. (¿Existirá alguna confabulación entre los OVNIS y Zerpa?)
En ese documental Zerpa mostraba a los espectadores correntinos –particularmente
a quiénes leen la revista mensual “Cuarta
Dimensión” que él dirige y que informa sobre la vida extraterrestre–, cómo
un OVNI aterrizó con siete humanoides y cómo tres de ellos se paseaban por
Buenos Aires… Esos sí que eran contactos del tercer tipo y no del primer tipo
como éste que nos contó Sánchez Aguilar y la gente del “Catamarán II” y de la
parrilla “Ché Cambá”. (Curioso: todos los testigos estaban de fiesta, con
varias copitas, salvo raras excepciones).
EL LITORAL realizó inútiles esfuerzos por charlar con Fabio Zerpa,
a poco de producido el raid de la flotilla de OVNIS: concluida la segunda
sesión de “Contacto del Tercer Tipo”, este ovnílogo abandonó nuestra
ciudad –¿en algún platillo volador?–,
alrededor de la medianoche del miércoles último.
Zerpa dijo a EL LITORAL –antes que aparecieran los mencionados
OVNIS–, que a estas naves extraterrestres les agrada el agua. De allí ese paseíto
frente al “Catamarán II” y junto al puente “General Belgrano”.
En la jornada anterior, EL LITORAL recibió llamadas de pobladores
de diversos parajes de San Luis del Palmar, Empedrado, Saladas, Bella Vista,
Santa Lucía, Goya, Esquina, Sauce, Mercedes, Curuzú Cuatiá, Itá Ibaté, Santo
Tomé y hasta de la misma Cuna del General San Martín, Yapeyú, informando que
por esos lugares pasaron los OVNIS.” [El Litoral, 1978: 16].